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Libano
1986
LA RAÍZ DE DIOS EN EL YO DEL HOMBRE SEGÚN PAVEL FLORENSKY _ 49 El camino de Florenskij invitaría a transcender la interioridad psicológica para acceder a la interioridad-objetividad del espíritu. Pero …Más
LA RAÍZ DE DIOS EN EL YO DEL HOMBRE SEGÚN PAVEL FLORENSKY _ 49

El camino de Florenskij invitaría a transcender la interioridad psicológica para acceder a la interioridad-objetividad del espíritu. Pero esto es ya un salto hacia la transcendencia, el acceso misterioso a ese nivel de hondura que sólo los pneumatólogos, con Dostoevskij a la cabeza, saben intuir y explorar dolorosamente.

Su insistencia en el puesto y el carácter “cósmico” de la persona responde, por otra parte, a una de las principales preocupaciones teológicas que, según Zen’kovskij, determina el estilo de la teología oriental: el esfuerzo por comprender espiritualmente, de un modo concreto, el mundo creado. ¿Cuál es la última raíz que hace de la persona considerada de un modo objetivo, no una cosa entre las cosas, ni tampoco un mero fluir de estados psicológicos, sino un elemento espiritual de la creación divina? Sin duda alguna, la imagen de Dios en el hombre.

La ontología de Florenskij está basada en la afirmación de la revelación del noúmeno en el fenómeno y de la Impregnación de lo visible por la “energía” de lo invisible. Esto es el símbolo. En todos los ámbitos, el mundo noumenal no se encuentra para nuestro autor en una región abstracta, sino que, en cuanto idea, es la profundidad de la mirada de un ser empírico determinado. Esto configura la realidad, cualquier realidad empírica, como un símbolo. En el símbolo se distingue el puro elemento empírico y el significado transcendente. Cuando lo empírico se encierra en la propia inmanencia espacio-temporal, en la identidad consigo mismo, se queda vacío de sentido y perece. Cuando lo empírico es, sin embargo, “más grande que sí mismo”, entonces, orientado hacia el polo transcendente, se llena de significado. Esto es así especialmente en el hombre, símbolo de los símbolos, icono por antonomasia. El hombre está compuesto de un núcleo noumenal y de una esfera empírica o de manifestación.
monica medina
Pável Aleksándrovich Florenski (en ruso: Павел Александрович Флоренский; nació en Yevlax -Imperio ruso, hoy en Azerbaiyán- el 9 de enero de 18821 y fue fusilado en algún lugar próximo a Leningrado el 8 de diciembre de 1937) fue un filósofo, historiador del arte, matemático y sacerdote ruso. Su compleja figura intelectual y sus aportaciones a la literatura, la teología y la …Más
Pável Aleksándrovich Florenski (en ruso: Павел Александрович Флоренский; nació en Yevlax -Imperio ruso, hoy en Azerbaiyán- el 9 de enero de 18821 y fue fusilado en algún lugar próximo a Leningrado el 8 de diciembre de 1937) fue un filósofo, historiador del arte, matemático y sacerdote ruso. Su compleja figura intelectual y sus aportaciones a la literatura, la teología y la filosofía contemporáneas (especialmente a la filosofía de la ciencia) se han difundido sobre todo a partir de 1991, tras la apertura de los archivos de la KGB. Murió ejecutado por el régimen soviético, tras haber sufrido numerosos arrestos y haber pasado varios años en el Gulag. Fue padre del geólogo y astrónomo Kiril Florenski, a quien escribió estas palabras en una carta de 1935 que resumen la actitud vital de Florenski: