Benedicto XVI reza por el mundo entero.

Crecer en la concordia, buscar la verdad. Es el mensaje del Papa antes de dejar Portugal el viernes por la tarde, después de cuatro intensos días en Lisboa, Fátima y Oporto. En Fátima, ha dicho el Papa, he rezado por el mundo entero pidiendo que el futuro traiga mayor fraternidad y solidaridad, un mayor respeto recíproco y una renovada confianza en Dios, nuestro Padre que está en los cielos. He podido ver el entusiasmo de los niños y de los jóvenes, ha añadido Benedicto XVI, la fiel adhesión de los presbíteros, los diáconos y los religiosos, la dedicación pastoral de los obispos, la voluntad de buscar la verdad y la belleza evidente en el mundo de la cultura, la creatividad de los trabajadores de la pastoral social, y la fe vibrante de los fieles de las diócesis que he visitado. Mi deseo es que mi visita sea un incentivo para un renovado ardor espiritual y apostólico y que el Evangelio se revele como levadura de una auténtica renovación de toda la sociedad.